De Vuelta En Dos Ruedas
Durante un mes y medio estuve sin la moto, y no por decisión propia.
Pasó la navidad, el año nuevo. Me perdí del buen clima, los paseos de mis amigos.
Hice un paseo al Cajón en auto, pero obviamente no fue lo mismo.
Ires y venires, un proceso no muy agradable para resolver la compensación por el choque, pero al final cumplió con pagar el arreglo de la moto y un casco nuevo. Lo que el seguro obligatorio me reembolsará por los gastos médicos está por verse.
El viernes me entregaron la moto, y procedí a trabajar el ella. Lo primero que noté:
Ese tornillo es uno de los que sostienen la parrilla, y está doblado.
Le cambié la funda del estanque (el anterior estaba manchado por la bencina del choque) y le coloqué fuelles nuevos, porque los viejos estaban cayéndose a pedazos. Para eso tuve que desmontar las telescópicas, algo que tenía intenciones de hacer de todas maneras, no porque desconfiara en particular del taller donde trabajaron en la moto, sino como criterio general de seguridad. Y, como siempre, todo con calma, cariño y una llave de torque.
Volver a andar se sentía un poco raro. La moto la escuchaba más ronca, se me fué un poco la habilidad de encontrar la curva de potencia, sentía como si me resbalara sobre el asiento con los tirones que daba.
El sábado hubo paseo. La idea era llegar a Melipilla, y dar unas vueltas por ahí. Cuando llegué a la Shell de la Laguna Carén, no vi a nadie, llamé a Jano, y me dijo que se devolvían a Santiago, habían chocado a Rigeki. Efectivamente, al otro lado de la carretera, pasaba en ese momento la pequeña caravana.
Llegué a la Posta Central. Me contaron. Un automovilista se había pasado una luz roja, chocando a Rigeki y su polola, quien iba atrás. El conductor del auto lo negó todo, diciendo que no había sido culpa de él. Dada la diferencia de declaraciones, los Carabineros se llevaron a Rigeki a declarar a una comisaría. Finalmente el conductor admitió que había sido culpa suya. Rigeki y su polola tuvieron solo contusiones, por suerte, pero estaban bastante adoloridos.
Ellos se fueron a sus respectivas casas, y nosotros seguimos adelante con el paseo.
De vuelta, tomamos la cuesta Barriga. Curvas!
Dando la vuelta a una de las curvas, ya de bajada, vi del rabillo del ojo una subida al cerro, muy empinada, pero lograble. Me metí, subiendo en primera y parado, agachado sobre el manubrio.
Y seguí subiendo. Abajo, el camino pavimentado.
Qué gusto esto de ir a meterse al medio de la nada.
La historia de siempre: subir, subir, subir, camino transitable por 4x4, luego camino transitable en cuatrimoto, luego sólo un camino de vacas, empinado, angosto y sin espacio para dar vuelta la moto. 5 minutos de malabarismo para darla vuelta, y poder volver a bajar, al filo entre una patinada controlada y un descenso descontrolado.
Un incendio.
El lunes, dicho sea de paso, defendí mi tesis de Magister, y obtuve un 7.0.
Para celebrar, salí a dar vueltas por Santiago. Un paseo fotográfico, pero por el centro.
Y en un estacionamiento por ahí, este graffitti.
El cuidador de dicho estacionamiento, con su árbol solitario:
Matucana:
Karlitos supo identificar este block, pero ya se me olvidó :-P
Av. Pajaritos.
Y con eso, vuelta a casa, cansado, y listo para celebrar con amigos, pero sobre todo, feliz por estar de vuelta en dos ruedas.
Pasó la navidad, el año nuevo. Me perdí del buen clima, los paseos de mis amigos.
Hice un paseo al Cajón en auto, pero obviamente no fue lo mismo.
Ires y venires, un proceso no muy agradable para resolver la compensación por el choque, pero al final cumplió con pagar el arreglo de la moto y un casco nuevo. Lo que el seguro obligatorio me reembolsará por los gastos médicos está por verse.
El viernes me entregaron la moto, y procedí a trabajar el ella. Lo primero que noté:
Ese tornillo es uno de los que sostienen la parrilla, y está doblado.
Le cambié la funda del estanque (el anterior estaba manchado por la bencina del choque) y le coloqué fuelles nuevos, porque los viejos estaban cayéndose a pedazos. Para eso tuve que desmontar las telescópicas, algo que tenía intenciones de hacer de todas maneras, no porque desconfiara en particular del taller donde trabajaron en la moto, sino como criterio general de seguridad. Y, como siempre, todo con calma, cariño y una llave de torque.
Volver a andar se sentía un poco raro. La moto la escuchaba más ronca, se me fué un poco la habilidad de encontrar la curva de potencia, sentía como si me resbalara sobre el asiento con los tirones que daba.
El sábado hubo paseo. La idea era llegar a Melipilla, y dar unas vueltas por ahí. Cuando llegué a la Shell de la Laguna Carén, no vi a nadie, llamé a Jano, y me dijo que se devolvían a Santiago, habían chocado a Rigeki. Efectivamente, al otro lado de la carretera, pasaba en ese momento la pequeña caravana.
Llegué a la Posta Central. Me contaron. Un automovilista se había pasado una luz roja, chocando a Rigeki y su polola, quien iba atrás. El conductor del auto lo negó todo, diciendo que no había sido culpa de él. Dada la diferencia de declaraciones, los Carabineros se llevaron a Rigeki a declarar a una comisaría. Finalmente el conductor admitió que había sido culpa suya. Rigeki y su polola tuvieron solo contusiones, por suerte, pero estaban bastante adoloridos.
Ellos se fueron a sus respectivas casas, y nosotros seguimos adelante con el paseo.
De vuelta, tomamos la cuesta Barriga. Curvas!
Dando la vuelta a una de las curvas, ya de bajada, vi del rabillo del ojo una subida al cerro, muy empinada, pero lograble. Me metí, subiendo en primera y parado, agachado sobre el manubrio.
Y seguí subiendo. Abajo, el camino pavimentado.
Qué gusto esto de ir a meterse al medio de la nada.
La historia de siempre: subir, subir, subir, camino transitable por 4x4, luego camino transitable en cuatrimoto, luego sólo un camino de vacas, empinado, angosto y sin espacio para dar vuelta la moto. 5 minutos de malabarismo para darla vuelta, y poder volver a bajar, al filo entre una patinada controlada y un descenso descontrolado.
Un incendio.
El lunes, dicho sea de paso, defendí mi tesis de Magister, y obtuve un 7.0.
Para celebrar, salí a dar vueltas por Santiago. Un paseo fotográfico, pero por el centro.
Y en un estacionamiento por ahí, este graffitti.
El cuidador de dicho estacionamiento, con su árbol solitario:
Matucana:
Karlitos supo identificar este block, pero ya se me olvidó :-P
Av. Pajaritos.
Y con eso, vuelta a casa, cansado, y listo para celebrar con amigos, pero sobre todo, feliz por estar de vuelta en dos ruedas.
13 Comments:
Te felicito por tus fotos!!!
muy buenas, muy bien logradas!!!
Respecto a tu moto, guauu, espero que funcione igual o mejor que antes!!!
y un millón de felicitaciones por tus logros académicos!!!, es super gratificante concretar etapas de ese tipo en nuestras vidas!!!
Un abrazo fraterno, JLo está muy bien, en buenas manos y muy contenta!!!
Hola Paul!
felicidades por tu regreso a las pistas, literalmente! habra que esperar que tanto piloto como maquina no vuelvan a sufrir por la imprudencia de algun automovilista..
saludos,
Jose Miguel
Creo anteriormente haber manifestado mi admiracion, pero no puedo dejar de hacerlo en esta ocacion.
Te felicito Paul, muy bonitas fotos.
Ademas por lo del magister!
Mauricio Cabrera
Qué bueno que hayas vuelto!
Felicitaciones por lo del magister!
XD
Por suerte salió viva de la burocracia!
Una vez más: FELICITACIONES!!!
Me alegro enormemente que hayas recuperado tu moto.
Honestamente, ya me había acostumbrado a contar con tus relatos para hacer más soportables estas tardes de verano en la oficina. Que bueno que ahora seguiremos contando con tus aventuras.
Y felicitaciones por el Magister... ahora imagino vendrá el doctorado, o no?
Salu2
Octavio
Villa Portales, se llama ese conjunto de blocks.
El graffitti ese queda cerca de mi casa, y pensé en fotografiarlo dado que el autor aprovechó de muy buena forma el perfil de la muralla para lograr un efecto de perspectiva, en fin, te quedó mucho mejor de lo que yo hubiese hecho.
Felicidades nuevamente, y aún tenemos una junta pendiente.
Paul, Unas muy buenas fotos acompañadas de un buen relato (otra vez gratamente sorprendida)... y de nuevo muchas felicitaciones!!! por tu magister..solo queda decirte que Para Ti Siempre Lo Mejor!!!
Rita
Your post-thesis photos of Santiago brought tears to my eyes. Don't know why, but I was deeply affected.
-Your brother in the wind.
Felicitaciones por el magister Paul!!
Que bueno que ya te encuentres nuevamente arriba de la moto, y con camara en mano.
Saludos,
Mario
Nazareo, gracias. La moto por suerte no sufrió internamente, y está igual que siempre. Gracias por las felicitaciones.
Jose Miguel, esperemos, esperemos.
Maury y Layfan, gracias!
jeka, tarde pero viva.
Octavio, sí, esa es un posibilidad...
Pollo, así que vives por ahí? Mira tu. Me gustó mucho el elefante. Inicialmente pensé que el chico era un Hitler joven, y podría serlo, no?
Rita, gracias!
Mr anonymous brother in the wind, I'm amazed that they had that effect, but I hope they were good tears.
Mario Gracias Mame!
Y no lo olviden chicos y chicas, si quieren recibir notificaciones por email de los posteos, basta con hacer click en este link, y podrán introducir su dirección de correo.
Saludos,
d.
que bueno que hayas recuperado tu moto... te devolvio la vida!!! y felicitaciones por tu defensa ;)
saludos
cristina
Te felicito por el examen de grado, excelente! y por volver a andar en moto nuevamente, hoy me voy de nuevo lejos, así que si pasas por allí avisa para que te regale fruta :P o un pedazo de salmón. Have lots of fun in your vacations and take care!
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