Explorando Los Cerros De Lampa

Chico nos llevó a Ben y a mi a recorrer un circuito de enduro por ahí cerca de Lampa ayer. Dimos algunas vueltas por aquí y por allá.

Primero, subir una cuesta.

Después, bajarla.




Y ahora yo.



Gracias por el comentario, Chico.

Subieron otra vez más por la cuesta, y los seguí, pero con unos minutos de diferencia. Quise bajar la presión de mi neumático delantero. Para cuando había subido la primera cuesta, no estaban por ninguna parte. No, espera. Ahí están, arriba, en la cima de una colina. Me dirigí hacia ellos, pero cuando llegué, esta vez sí que no los encontré más. Seguí subiendo y subiendo, loma tras loma, hasta que decidí que sería prudente detenerme, porque no sabía cómo seguía el terreno más adelante.

Qué vista!





Llamé a Ben. Estaban abajo, y Chico me dijo que era hora de irse, ya que habíamos entrado sin pagar. Hm, eso sería complejo. Comencé a bajar, pero obviamente seguí la huella equivocada. Pasaron 10 minutos antes de volver al punto de partida original. No estaban. Volví a la entrada, y los encontré flirteando con la chica encargada.

"Quieren ver como salta una XR400?" nos preguntó Chico.



Ese fue el primer intento.



Lo alenté para que saltara una y otra vez.






La imagen siguiente es un cuadro de un video que hice. Noten cómo se comprime la suspensión de la XR400. Claramente, se puede saltar con esta moto, pero no con la suspe de fábrica, ni de una manera que te lleve a capturar la atención y fascinación del público...





Y después? Pues Chico recordaba una salida a una mina que había hecho hace unos años. Era necesario entrar por el alambrado de un terreno en los faldeos de los cerros alrededor de Lampa.

Rodamos lentamente por el camino, buscando alguna entrada. Finalmente, tuvimos que descender por el lado derecho del camino, pasando una pila de unos 50 pañales usados (sin exagerar), y usar un túnel de aguas lluvias para cruzar al otro lado. Una vez adentro, sin embargo, pudimos seguir nuestro camino sin problemas.

No dimos con la mina, pero sí encontramos un pequeño salto, y pasamos un buen rato ahí jugando.