Tuesday, April 08, 2008

San Lorenzo Canyon

Cielos despejados y una temperatura ambiente que por lo menos no me congelaba las manos al andar. Algo vi en ADVRider sobre un paseo al San Lorenzo Canyon, a unos 100 km al sur de Albuquerque, pero no me organicé para ir con la gente. Además, iban a partir a una hora indecente, como buenos gringos, y yo siempre valoro el que me pille la noche, por los colores.

Así que sin apuro, sin apuro alguno, emprendí la marcha hacia el sur.

El KMZ para Google Earth se puede bajar aquí.



Por la zona sur de Albuquerque hay campos, sorprendentemente, pero todo de ese color marrón invernal totalmente muerto.



El Río Grande es bordeado por árboles a lo largo de kilómetros y kilómetros de ribera.



Una vista más ancha. (click).



Y sí, aún dentro de la ciudad. Le llaman "El Bosque".

Gente pescando al borde de un canal, justo después de cruzar el río.



Aburrido del I-25, crucé el río nuevamente hacia Los Lunas, un pueblo mediano, con calles anchas, estaciones de servicio, tiendas con estacionamiento, la misma mierda que se ve en todas partes por aquí.

Un poco más allá, todo eso se acabó.



Más allá de los campos, me encontré con un camino, y decidí seguirlo. Difícil saber si era propiedad privada o no. Pico en el ojo.



El terreno era una larga franja elevada, bordeando un canal artificial, arenoso y seco. A la izquierda, árboles en estado invernal.



Y más grande. (click).



(click).



Bajé de lo alto hacia la zona arbolada. Arena, arena por todas partes.

De la nada, me encontré frente a frente con dos latinos en una camioneta. De cabeza rapada, polera musculosa, bigotitos lineales. Los saludé con la mano y me hice a un lado.



Aha! Llegué eventualmente a la orilla.



Al otro lado, una vista común por aquí.



Fue entonces, caminando por aquí y por allá, que ví algo que relucía en el suelo. Qué es eso?



Por si no lo vieron, aquí está, más de cerca.



Miedito!! Involuntariamente miré a mi alrededor, buscando un cuerpo, alguna señal de una escaramuza; quizás las huellas dejadas por un pobre desafortunado amarrado con soga, la cabeza en un saco de harina, mientras era arrastrado hacia el río. No, nada de eso.

Miré más de cerca los casquillos, y ciertamente se veían bastante chicos. Bueh, supongo que eran simplemente personas disparando hacia el otro lado del río.

Suficiente naturaleza rural, yo me largo hacia la autopista.



Por aquí y por allá uno encuentra legados de la historia del Route 66 y alrededores.






Hacia los lados de la autopista, esto es New Mexico rural.



Tuve problemas para dar con la pasada al San Lorenzo Canyon. Iba por la caletera este, buscando alguna pasada hacia la izquierda. Tomé un camino de tierra, con algunas casas hacia el fondo. Vi un par de niños y un par de adultos frente a una de las casas. Aquí no hay rejas, ni muros, ni nada. Todo abierto.

"Esto es un camino privado" me dijo el tipo, de unos 30 años, antes siquiera de poder saludarlo. "Lo sé, pero vine a hacerte una pregunta". Qué descortés es la gente por aquí.

Finalmente di con el lugar. El otro tipo fue el que me indicó; me tiró por el lecho del arroyo, un par de kilómetros de arena profunda. El que me habló lo miraba extrañado mientras yo recibía mis instrucciones. "Estás seguro que es por ahí?" le preguntó. "Sí, sí, seguro". Y seguía dando indicaciones.

Llegué sudado por el sol, la chaqueta abrigada, y por manejar la moto en la arena.

Se abrió frente a mi un cañón angosto, poco profundo, de lecho arenoso.



El ruido de la moto retumbaba contra las paredes de roca. Mi XR250R está completamente des-restringida; el escape es básicamente un tubo conectado a una cámara de resonancia. El de esta XR650L no dista tanto, pero sí pasa por unas capas de lana mineral, el llamado packing. El resultado es que la 250 suena hasta más fuerte que la 650, pero la L tiene un sonido ronco, bajísimo, y siempre a bajas RPM. En el cañón, sonaba algo así como un helicóptero UH-1, hecho infame por la guerra de Vietnam.

Mirando hacia atrás, podía ver mi huella en la arena, e incluso distinguir cada explosión del pistón con las marcas regulares de arena removida. Es una bestia este aparato.

Y cómo se estaciona una moto en la arena, para sacar una foto? Pues se traba la rueda delantera, y sueltas el embrague, dejando que se cave su propio surco.



Y otra vista más ancha. (click).



Formaciones dignas del coyote y el correcaminos, en escala chica.



No había nadie más.



Seguí adelante, curioso de ver dónde terminaría. Otra ilustración de cómo estacionar una moto en la arena.



(click).



El cañón en sí no tendrá más de un kilómetro, o por ahí.



Volví al lugar anterior. Qué silencio al apagar el motor.



(click).






Encontré una grieta secundaria, apenas del ancho de un auto, pero de muros altos, altos.






Y el suelo de arena, 100% arena suave y fría. Al fondo, restos de una fogata, y un espacio semicircular ideal para acampar.



Volví al sol, porque comenzó a hacer frío.

Saqué un sandwich de queso, jugo de naranja diluído (método para que el jugo de naranja cueste la mitad, o dure el doble, según se mire).

Linda moto.



Un tronco seco, arrastrado por un torrente veraniego.



No había nadie alrededor.



La roca era algún tipo de roca arenosa, compuesta.



Armé mis cosas, y tomé el camino de vuelta, evitando el lecho del arroyo.



Hacia el sur, buscando el acceso a la autopista.



Convencido de que ningún paco me molestaría en la caletera, me di el gusto de sentir las ondulaciones a alta velocidad.



Y con eso, de vuelta a casa.

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4 Comments:

Anonymous Anonymous said...

increible la nueva adquisicion, hace bastante tiempo que vengo leyendo tus historias, m entretienen bastante y me animan a andar mi moto..
suerte en tus andanzas..

y continua con tus historias..
saludos de concepcion, Chile

11:32 PM  
Blogger Andrés Reitze said...

Dude... AWSOME! ... so... ummm.... did yo happen to bump in with easy rider around there?... ;-)

8:25 PM  
Blogger Claudio said...

Hola mi primo Rodrigo me envio tu log de aventuras, te felicito, andar solo por esas latitudes no es facil sobretodo en ese desierto en moto. Que LIbertad!!!
desde Santiago, por ahora, saludos de otro viajero Claudio, PD: ya escribiré mis memorias...

1:11 PM  
Anonymous Anonymous said...

Paul, yo vendi mi XR 600 porque no tenia arranque electrico, y me da envidia (sana)ver la tuya con ese tan "preciado" accesorio u opcional.....Lindo paseo, paseo, pero nada que envidiarle a Chilito, excepto que no tienes que abrir o cerrar un cerco cada 1 km.....saludos and Ride with Care

1:24 PM  

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